Smartphones flexibles, experiencias inmersivas, dispositivos autónomos, analítica aumentada… 2019 es apasionante no solo para los fans de la tecnología, porque en el día a día ya estamos conviviendo con innovaciones que nos van a cambiar la vida, incluida Ford Pass Connect, la App que revoluciona tu relación con tu Ford.
Estamos en un momento histórico apasionante para la innovación, las tecnologías se superan año a año haciendo que lo que ayer nos parecía una novedad imbatible hoy se vea como un avance caduco. Para poner las cosas en perspectiva antes incluso de que lleguen, hemos analizado un decálogo de revoluciones tecnológicas que van interactuar con nuestra vida diaria como, por ejemplo, el nuevo modem FordPass Connect.
Maneja tu Ford desde el teléfono
FordPass Connect cambia para siempre la relación que tienes con tu coche y la lleva a otro nivel: te permite realizar funciones que hasta hace nada eran ciencia-ficción. Con solo tocar la pantalla de tu móvil, por ejemplo, puedes encender tu Ford a distancia. Esto es muy útil en zonas de mucho frío o calor, ya que cuando llegas al coche habrá llegado a su temperatura óptima antes de arrancar. Y con la máxima seguridad: cuando enciendes el motor desde tu smartphone se bloquean las puertas automáticamente. Algo que también puedes hacer manualmente en cualquier momento.
La ‘app + modem’ también localiza tu Ford allí donde esté. Es habitual que, cuando visitamos una ciudad por primera vez, nos desorientemos y no nos acordemos de dónde hemos dejado aparcado el coche. FordPass Connect te lo señala en un mapa y te indica el mejor camino para llegar hasta él. Además, te permite saber en todo momento cuál es el estado de su Ford: de un vistazo sabrás, por ejemplo, el nivel de combustible, la presión de los neumáticos o el kilometraje. Esto es muy útil cuando tienes un viaje planeado y quieres tener tu coche a punto antes de lanzarte a la carretera.
Un móvil que se dobla como un folio
Dicen desde Royole, la firma tecnológica afincada en California, que la pantalla de su último ‘smartphone’ es prácticamente irrompible. Es normal que hagan hincapié en este punto: el FlexPai, como su nombre indica, es el primer móvil del mundo a la venta con pantalla flexible. Los ingenieros se han aplicado a fondo para disipar las dudas de los más escépticos: aseguran que han doblado la pantalla 200.000 veces seguidas, y permanece intacta.
Seguro que te estarás preguntando qué ventajas tiene un móvil así, aparte de dejar boquiabiertos a los demás. Para empezar, el poder disfrutar de una pantalla tamaño tablet de 7,8 pulgadas, que al plegarse, se convierte en dos, y reduce su tamaño al de un ‘smartphone’ estándar. Y por otro lado, el grafeno del que está compuesta no solo le proporciona esa flexibilidad inédita a la pantalla, sino que permite un nivel de definición elevadísimo. Aunque es la primera en lanzar un móvil así al mercado, Royole no es la única, y es muy posible que en breve estemos rodeados de pantallas flexibles: Samsung ya ha anunciado que su modelo saldrá a la venta este año.
Ciudades que piensan por ti
La tecnología para la conducción autónoma ya existe y Ford incorpora muchos dispositivos que van en esa dirección, como el asistente de carril o el reconocimiento de señales de tráfico, por ejemplo. Según los expertos, es posible que en 10 años muchas carreteras estén ya preparadas para una circulación autónoma total, la de nivel 5, en la que el conductor se puede desentender del volante. La pregunta es: ¿Estarán preparadas las ciudades para ese momento? Ya hay varios proyectos en ese sentido, como el de empresa de soluciones tecnológicas IK4 Tekniker y sus semáforos inteligentes. Según el flujo de tráfico, deciden por su cuenta cuándo ponerse en rojo o verde. Ya han realizado una prueba piloto en el centro Múnich, con éxito: mientras estuvieron funcionando estos semáforos autónomos, se redujo la densidad de tráfico en un 40%.
Un cerebro infinito
¿Harto de pasar horas y horas frente a la pantalla del ordenador analizando tablas de excel? La analítica aumentada va a ser cada vez más habitual a partir de ahora, especialmente en las empresas. Se trata de potentes softwares basados en el ‘big data’ que pueden comparar millones de datos en un instante, sacar conclusiones y establecer patrones. Esto tiene una utilidad clara en los estudios de mercado, pero no solo: en el sector medioambiental, es un arma muy valiosa en la lucha contra el calentamiento global, porque establece de forma certera cómo se comportará el clima en los próximos años. En la empresa de soluciones tecnológicas Qlik se refieren a este fenómeno como inteligencia aumentada: “amplifica el poder de la intuición de una persona con la velocidad y la magnitud de la tecnología de procesamiento de datos”. Y añaden: “La curiosidad humana se une por primera vez a la inteligencia artificial. Van a suceder cosas asombrosas”.
Un millón de experiencias, sin salir de casa
La tecnología inmersiva va mucho más allá de lo que conocemos como realidad virtual. Porque no se limita a unas gafas que proyectan imágenes, sino de hologramas, sensores que transmiten estímulos hápticos y hasta difusores de olores. Si tocas un piano virtual, por ejemplo, aunque sea un holograma, tus dedos estarán recibiendo la sensación táctil de las teclas. Y si viajas virtualmente a una calle de Pekín el difusor emitirá los olores típicos de esa ciudad. Aunque ya se le han visto aplicaciones en campos como la medicina (por ejemplo, para las operaciones a distancia), los expertos apuntan a que las experiencias inmersivas tendrán su mayor impacto en el entretenimiento. Y es que las posibilidades son infinitas: desde recrear entornos totalmente inventados, hasta viajar, sin moverse de tu sofá, a una isla paradisiaca del Pacífico.
Discos duros de ADN
En 2018, un equipo de investigadores aplicó, por primera vez, un algoritmo capaz de transmitir vídeo en streaming a una cadena de ADN, de la que surgió una nueva técnica llamada DNA Fountain. La ventaja es poder almacenar la máxima información en el mínimo espacio: que es capaz de almacenar 215 petabytes de datos en solo un gramo de material biológico. Para que te hagas una idea: un petabyte equivale a un millón de gigas. En Microsoft ya han anunciado que están dedicando muchos recursos a esta nueva tecnología.
Ordenadores para olvidarte del enchufe
Con los últimos procesadores que ha desarrollado Qualcom, un ordenador portátil por fin hará honor a este objetivo. La empresa, centrada hasta ahora en los móviles, entra ahora en el sector de las computadoras con un modelo que, según prometen desde la empresa, logrará autonomías de 20 horas.
Consolas con juegos infinitos
Con el aumento exponencial de la capacidad de internet y la inminente implantación del 5G, los videojuegos en streaming tienen que cada vez más aceptación. Xbox ha tomado nota, y ha adelantado que, seguramente, este año presentará su primera consola en la que no existirán ni cartuchos, ni CD, ni pen-drive. Estará enfocada, exclusivamente, a los juegos en red.
Llega la computación cuántica
Olvídate de los ceros y unos. Este sistema de cálculo digital de los procesadores será pronto cosa del pasado cuando se implante el bit cuántico. Dicho llanamente: la capacidad de procesamiento aumentará de forma impresionante, un ordenador podrá descodificar el genoma humano o predecir el movimiento de las moléculas. Esto tendrá aplicaciones médicas hasta ahora imposibles, pero la revolución llegará a todos los sectores imaginables.
Hablaremos con robots
Cuando decimos hablar, nos referimos a hacerlo como si nuestro interlocutor fuera un humano. No se trata de un robot físico, sino de los ‘chatbots‘, esto es: sistemas de inteligencia artificial que te permiten conversar con un servidor, plantearle dudas, quejas o hacerle peticiones. Ya estaban implantados, pero la novedad para este año es la evolución del sistema Natural Language Processing (NLP). Tendrás la sensación de que hay una persona al otro lado del teclado, pero en realidad, estarás chateando con una máquina.