El ‘bleisure’, la combinación entre ocio y negocio, está en expansión dese que Forbes confirmó que un 36% de aquellos que viajan por trabajo aprovechan también para pasar unos días de tiempo libre. Te descubrimos esta nueva tendencia de turismo y te explicamos cómo sacarle el máximo partido.
Bleisure, del inglés business & pleasure, es la nueva tendencia que está revolucionando los viajes de negocios y crece como la espuma gracias a la tecnología y las ofertas personalizadas que estos viajeros demandan. Porque separar los negocios del placer ya es historia, lo suyo es aprovechar los tiempos muertos entre reuniones o los días extra al comienzo, final o durante un viaje de negocios para disfrutar del ocio, sobre todo si te desplazas en la comodidad de tu Ford. De hecho, según Forbes el 57% de las compañías ya contemplan que sus empleados de entre 20 y 30 años puedan extender estos viajes de negocios y unirlos con sus días de vacaciones. Y más si son a destinos lejanos o a ciudades tan interesantes como las principales capitales peninsulares. ¿Quién no querría quedarse unos días extra en Sevilla, Lisboa, Madrid, Oporto, Barcelona, Coimbra, Bilbao o Braga?
Para eso trabajan las agencias online y las apps de viajes, para ofrecer nuevas experiencias a los millennials que lideran esta tendencia, con el desafío de tener que ofrecer ambas opciones, trabajo y placer, a la misma persona. Los números lo dejan claro: un estudio de Global Business Travel Association, la principal asociación mundial de gestores de viajes corporativos, señala que el 37% de los estadounidenses en viaje de negocios escogió la opción bleisure en 2017, siendo un 48% de ellos millennials. Un negocio redondo para empresas como Travelbank, app “para el viajero de negocios moderno, con cobertura 24/7”, en la que se pueden reservar coches, hoteles, vuelos y alojamientos alternativos, además de predecir costes con precios a tiempo real y ofrecer información sobre Wi-Fi, upgrades o reservar asiento junto a un compañero, y ganar puntos con Airbnb o Uber. Su responsable, Duke Chung, predice en el blog de Adobe que 2018 será el año en que bleisure se convierta en la norma. “Cada vez será más aceptado por las empresas”, comenta.
¿Más datos?
El 78% de los jóvenes sacaron tiempo personal en sus viajes de negocios, y el 60% reconoce que esos momentos de vacaciones ayudan a “pensar más, ampliar conocimientos y cultura”. Una de las razones del auge del bleisure es que tienen hijos más tarde, lo que les permite no tener que volver a casa corriendo. “Están más preocupados por el equilibrio entre trabajo y vida personal; incluso por llevar a su familia, si la tienen, en los viajes”, dice a Forbes Evan Konwiser, de American Express Global Business Travel.
Booking también les ha preguntado, y el 30% de los encuestados estaría dispuesto a ganar menos si el trabajo consistiera en viajar más. Para los que todavía no están convencidos, el otro objetivo es introducir cambios en los agotadores viajes de trabajo: un par de días extra o pequeños añadidos en el presupuesto como una cena en un restaurante local de moda, porque las compañías que se ganan a los millennials son las que tienen claro el concepto de flexibilidad. Aunque no puedan pagar salarios altos o beneficios, seguramente podrán permitirse que sus empleados exploren una ciudad con un día libre. “Incorporar un evento o interés personal en un viaje de negocios hace que sea más equilibrado y puede que hasta inolvidable”, añade a Forbes Emily Sheehan, ingeniera en Twitter. De esta forma pueden volver con las pilas cargadas, en lugar de más cansados de lo que se fueron, teniendo muy presente lo que se espera de ellos respecto al tiempo dedicado y separando siempre los gastos en una y otra actividad.
Nuevas aplicaciones para viajeros de negocios
Además, para este segmento de viajeros hay aplicaciones muy interesantes como Detour, una ‘audioguía’ que propone recorridos a pie relatados por celebridades locales como actores o chefs en Estados Unidos, Europa y Asia, además de mostrar cómo ha ido cambiando ese lugar o barrio con el tiempo a través de la realidad aumentada.
También Airbnb ofrece nuevas experiencias para los viajeros de negocios como la posibilidad de reservar excursiones y otras actividades diseñadas por anfitriones locales. ¿Ejemplos? La degustación gastronómica ‘Los mejores sabores de Lisboa’, un concierto de flamenco en la famosa escuela Amor de Dios de Madrid, una ruta de arte urbano por Valencia, recorrer viñedos en bicicleta alrededor de Barcelona, aprender a pintar azulejos en Oporto o hacer cerámica en Sevilla.
Todo esto ha revolucionado el sector hasta tal punto, que ya se están dando compras como KDS por American Express Global Business Travel para, a través de su tecnología, ofrecer viajes bleisure online planificados y con todas las reservas, de principio a fin. “El proceso de reservar y buscar opciones asequibles es muy laborioso. Los bots de inteligencia artificial como Hipmunk permiten entender mejor las necesidades a lo largo del tiempo”, subraya la responsable de estrategia y marketing de viajes de Adobe, Julie Hoffmann.
Definitivamente, los nuevos hombres y mujeres de negocios lo tienen claro: su trabajo debe ofrecerles nuevas experiencias, sin fronteras entre sus aspiraciones profesionales y la opción de explorar el mundo.