Hay un movimiento en Madrid que está revolucionando la artesanía: los creadores más trendies está escogiendo antiguos oficios para llevarlos a la modernidad. Mostramos el trabajo del sastre Fernando García de la Calera, del carpintero Javier S. Medina, o del Premio Nacional del rotulador Diego Apesteguía. Un completo recorrido a través de sus manos.
Madrid se viste con una cálida manta hecha a mano: la que inspira el movimiento Arts & Crafts, que salpica las calles de la ciudad con excusas tentadoramente ideales para que gires la llave de tu Ford y pongas rumbo a la capital. Te invitamos a descubrir artesanos que crean trofeos de caza ecológicos, comercios engalanados con rótulos diseñados hoy con ADN de antaño, o exposiciones que nos descubren raptos de talento que parecían arrumbados.
Artesanos malasañeros
Comprueba paseando a cualquier hora por Malasaña por qué es uno de los barrios de moda de Europa. ¿Lo más evidente, lo que buscan en ella madrileños y visitantes? Su irresistible fusión de tradición y modernidad, embriagarse a sorbos de ese cóctel malasañero en el que todo coexiste orgánicamente: bares de tapas con coctelerías, carnicerías con espacios de coworking… y, de un tiempo a esta parte, la recuperación (o reinvención, podríamos decir) de un modo de hacer las cosas a tono con el pasado del barrio.
Por ejemplo, recuperando la función primordial de los letreros de los comercios –tradicionales o de nuevo cuño- como la mejor tarjeta de visita, como un grito contra la uniformidad de la franquicia y como un reclamo perfecto para el visitante que busca y encuentra, gracias a ellos, un lugar auténtico, único. Clásicos madrileños como La Bicicleta Café (Plaza de San Ildefonso, 9, www.labicicleta.com) o La Duquesita Pastelería (Fernando VI, 2, www.laduquesita.es) tienen algo en común: los rótulos que dan la bienvenida a sus clientes están hechos a mano, recuperando las técnicas tradicionales del pan de oro, el grabado de vidrio o la pintura con esmaltes. Tras ellos está el rotulista Diego Apesteguía, flamante premio al Emprendimiento en los Premios Nacionales de Artesanía y malasañero de pro: su taller, Rotulación a mano (www.rotulacionamano.com) está en una de las calles más castizas del barrio, Molino de Viento, que mezclando técnicas modernas con la artesanía más tradicional, crea carteles para locales comerciales con los que se recupera esa imagen prototípica de Madrid pero con una patina de contemporaneidad. “La imagen del Madrid auténtico que tiene la gente en la cabeza incluye no solo arquitectura, sino también rótulos elegantes, graficas de comercios tradicionales muy elaboradas, de diseño cuidado y estética atemporal”, nos cuenta Diego, “por lo tanto, seguir creando ese tipo de trabajos hace que las ciudades sigan siendo reales, y no clones impersonales las unas de las otras”.
Muy cerca del taller de Diego está The Concrete (calle Marqués de Santa Ana, 28, www.concretemadrid.es), la sastrería de Fernando Diego de la Calera, un diseñador de moda skate que se convirtió en el primer sastre de denim a medida de España. El trabajo de Fernando bebe del purismo francés de los años 20, el movimiento que preconizaba una vuelta a los orígenes y que se distinguía, como hace Fernando en sus diseños, por mezclar la elegancia con la comodidad de la moda artesanal: por eso, en la tienda, podemos encontrar ropa casual importada de Japón, Italia y Estados Unidos y de diseñadores españoles pero, sobre todo, el talento de Fernando brilla en el producto estrella de The Concrete, los vaqueros a medida de tela denim selvage japonés. Si quieres unos -¡y los querrás!-, tendrás que reservar cita previa para que Fernando te tome las medidas y cree una obra de arte solo para ti.
Y si quieres que tu Ford luzca como ningún otro tras tu paso por Malasaña, tienes que acercarte a la calle El Escorial, 28, a asombrarte del talento del artesano y restaurador extremeño Javier Sánchez Medina, que en su taller (www.javiersmedina.com) moldea con sus manos materiales como el mimbre, el ratán, la fibra o el bambú y de las que salen obras de arte como espejos y, especialmente, lo que él mismo llama “trofeos ecológicos”: cabezas de renos, toros, búfalos… de cuya captura cualquiera se podría enorgullecer.
En tu agenda viajera y artesana
Por si fuera poco, durante los próximos meses Madrid te reclama con dos citas que no pueden faltar en tu agenda viajera y que, sobre todo, certifican el auge del movimiento Arts and Crafts en Madrid. El imponente Palacio de Gaviria (Arenal, 9), uno de los palacetes madrileños más espectaculares, diseñado por el arquitecto Aníbal Álvarez a mediados del siglo XIX, acoge la muestra Alphonse Mucha, un amplísimo recorrido por la obra del considerado como padre del estilo Art Noveau: más de doscientas obras con sus famosas imágenes de mujeres seductoras combinadas con maquetas y diseños tipográficos innovadores, cuyo hálito está detrás de numerosos rincones art noveau de Madrid –y del resto del mundo- y que puedes visitar hasta el próximo 25 de febrero.
La segunda cita la tienes en otra bellísima joya del patrimonio arquitectónico madrileño, la Fundación Juan March (Castelló, 77, www.march.es), donde se expone hasta el 21 de enero William Morris y compañía: el movimiento Arts and Crafts en Gran Bretaña, una muestra donde vas a descubrir el increíble talento y carácter del padre del Arts and Crafts, el inglés William Morris, hombre polifacético donde los hubiera (diseñador, artesano, empresario, poeta, ensayista, agitador social…) y alrededor de quien la Fundación March te va a llevar de la mano por lo mejor y más significativo del Arts and Crafts, una selección de 300 obras: piezas de mobiliario, pinturas, grabados, cerámicas y encuadernaciones de los principales artistas de movimiento y que te van a inspirar, seguro, a tomarte un respiro y paladear los placeres de la paciencia, del trabajo artesanal: de lo auténtico.