¿Quieres sentirte chef por un día de la mano de uno de los más importantes cocineros de la ciudad de Cáceres? ¿Te atreves a meterte entre fogones? Este otoño no te vas a aburrir en la actual capital de la gastronomía española donde podrás saborear deliciosos platos y disfrutar de una ciudad llena de historia. ¿A qué esperas para subirte a tu Ford y descubrirlo por ti mismo?
Solo un buen plato de jamón ibérico extremeño y otro de queso de la torta del Casar, ya justifican recorrer unos cuantos kilómetros al volante de nuestro Ford para degustar estos manjares en su lugar de origen, donde saben aún mejor. Pero Cáceres esconde mucho más, desde una rica y variada gastronomía hasta uno de los patrimonios monumentales más impresionantes de España. Sin olvidar su gente, con su acento inconfundible.
Como capital de la gastronomía española en 2015, la ciudad extremeña te ofrece divertidos planes que podrás compartir en pareja, con amigos o junto a la familia. Hay propuestas para todos, solo hace falta llevar buena disposición y ganas de comer, para no perderte ninguno de los sabores. Por tu Ford no te preocupes: una vez llegues a la ciudad podrás dejarlo bien aparcado fuera del casco antiguo (con acceso en coche exclusivo para residentes) o en alguno de los aparcamientos públicos. En el centro no lo necesitarás para desplazarte, es una ciudad muy manejable.
Los lugares con más encanto para una buena cena o comida
Para empezar, ¿qué tal unas tapas por el casco viejo? Cada mes se organiza una ruta por los principales locales que ofrecen tapas elaboradas con un determinado producto. En octubre, la torta del Casar, en noviembre el cordero y la ternera extremeña y en diciembre el jamón ibérico de la Dehesa. ¿Con cuál te quedas? En La Minerva debes probar sus hamburguesas de rabo de toro o su arroz crujiente de patatera ibérica y gambas. Y en Hornos 25 encontrarás platos modernos como el carpaccio de atún rojo con vinagreta y otros más locales como la patatera con miel, huevo frito y queso emmental. Otra propuesta que te gustará es la tapería Bouquet en el que te recomendamos probar el solomillo de cerdo con salsa de caramelo de higo o el secreto ibérico con jarabe de regaliz.
Pero si lo tuyo no son las tapas no te preocupes porque hambre no vas a pasar, todo lo contrario. No faltan restaurantes en esta ciudad para todos los gustos y bolsillos. Si buscas una experiencia única y te puedes permitir un capricho, no dejes de visitar Atrio, donde José Polo y Toño Pérez han logrado dos estrellas Michelin. Toma nota de algunos platos que van a conquistar tu paladar: cortezas agridulces de ibérico, bollo negro de calamar, cigala con pan de algas y tierra de aceite y panceta ibérica en tempura con causa peruana y amaranto.
Otra opción más económica pero igualmente deliciosa es Oquendo, muy frecuentado por los cacereños donde se encuentra el popular cocinero Juanma Zamorano. Toda la carta es muy recomendable pero no te olvides de probar el revuelto especial de la casa, con langostinos encebollados y boletus.
Y si lo que buscas es hacer algo realmente diferente déjate seducir por alguna de las propuestas de la organización de Cáceres capital española de la gastronomía. Son de lo más variopintas porque podrás ordeñar una cabra y elaborar tu propio queso, ir a una cena clandestina en lugares misteriosos y singulares, hacer un safari fotográfico en 4×4 acompañado de un picnic campero con productos extremeños o aprender a cortar jamón de la mano de un profesional. Igualmente divertido te resultará ponerte un delantal y cocinar un menú completo con productos de Denominación de Origen extremeños, que son bastantes, entre ellos el jamón ibérico, la torta del Casar, el pimentón de la Vera o la ternera y el cordero. Apetecible, ¿verdad? Entra en su web (www.cacerescapitaldelagastronomia.es), busca las experiencias slowfood y reserva la que más te guste.
Café, postre y a la cama
Después de tanto comer puedes relajarte en La Traviata tomando un café o una copa en un local donde tendrás ocasión de contemplar esculturas o fotografías de artistas extremeños. Y no dejes de darte un paseo por el interior de la muralla de Cáceres y contemplar algunos de los muchos edificios que vas a encontrar, especialmente en la Plaza de Santa María. Recuerda que su centro histórico es Patrimonio de la Humanidad desde 1986 y te va a sorprender la excepcionalidad de esta pequeña ciudad. Y si quieres salir por la noche acércate a la calle Pizarro, donde están establecimientos como el café-bar La Habana, María Mandiles o Bulevar-Belle Art. Dicen que la noche cacereña es de las mejores de España.
Para elegir sitio donde dormir tampoco vas a tener dificultades. Si quieres tener una experiencia diferente te recomendamos la hospedería del Real Monasterio de Guadalupe, un emblemático monasterio gótico. Y si hablamos de Atrio como restaurante recomendable también hay que hacerlo en el apartado de los hoteles porque es uno de los más representativos alojamientos de Cáceres. Con una situación perfecta, es un hotel moderno en un entorno monumental donde la gastronomía es el santo y seña de la casa.
Y bien, ¿a qué esperas para dejarte seducir por Cáceres?
